¿Llego a tiempo? ¡¡Espero que sí!!
Paseando por blogs y páginas de facebook me encontré que alguien (perdonadme porque ahora no recuerdo quién fue) había combinado dos recetas del blog la receta de la felicidad. Me pareció una idea genial y que dejaría a todos con la boca abierta, jejeje. Así que decidí que pondría manos a la obra.
¡¡No imaginaba lo difícil que sería encontrar huevos blancos!! ¡¡Misión imposible!!
Comenzamos a mirar por todas las tiendas del barrio una a una, en busca de los huevos perdidos, jajajaja. En ninguna tienda del barrio había así que al final los encontramos en el mercado. Huevos ecológicos (porque no había otros...) ¡¡color blanco!!. Nunca me había fijado en que todos los huevos que encontramos por aquí son morenos, supongo que la compra de un producto tan básico lo hacemos por inercia y no nos fijamos en el color, algo a lo que no le damos importancia ¡¡hasta que no quieres teñirlos!!, jajajaja.
¡Por fín tenía los huevos!!
Esta fue la primera foto que recibieron mis catadores por un mensaje de whatsapp, no os podéis imaginar ¡¡el revuelo que se montó!!
¿Sera para una mona de pascua? ¿Será el Tiramisú? ¿Serán los cupcakes de los que nos habías hablado? ¿De chocolate? ¡¡Necesitamos una pista!!
¡¡Yo no podía parar de reir!! No podían imaginar lo que rondaba mi cabeza...
Pero... me encanta que sufran y ¡¡no doy pistas!! jajajaja
Ingredientes para pintar los huevos
Huevos blancos
Colorantes para uso alimenticio mejor en pasta o gel
Pegatinas con formita de corazón y circulos
Vinagre
Agua
Preparación
En un vaso ponemos 3/4 partes de agua.
Añadimos 1 cucharada de vinagre y el colorante elegido.
Colocamos las pegatinas a nuestros huevos que ya tendremos bien limpios.
Sumergimos los huevos uno a uno en el vaso para teñirlos, el tiempo dependerá del colorante y el color deseado.
Por último secamos con papel y quitamos las pegatinas.
Una vez teñidos y listos toca vaciarlos, así que haremos un agujerito en la parte de abajo del huevo, la que no se verá y luego lavamos con mucho cuidado porque se correrá la pintura si no tenemos cuidado y los dejaremos secar .
Preparamos el brownie, con una manga pastelera los rellenamos y horneamos.
Limpiamos el brownie que ha salido de la cascara y dejamos enfriar sobre una rejilla.
¡¡Y ya los tenemos listos!!
¿Chulos, Eh?
Y para que veáis que no todo sale bien.... Este se rajó un pelín la cascara y mirad como acabó el pobre...
¡¡Espero que os guste y que os animéis a pecar!!
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